El artista, que ya había estado nominado en el 2017, logra el galardón por «Terra»
Decía hace apenas dos semanas en una entrevista en el suplemento Fugas de La Voz que no iba a tener que esperar a la tercera, sino que al segundo intento se iba a hacer con el Grammy Latino. Así fue. En la noche de ayer Daniel Minimalia se convertía en el ganador el premio al mejor artista instrumental con su disco Terra (2020). La fiesta, en la que él aseguraba «haberse colado sin estar invitado» en aquella entrevista, lo coronó como un músico de alcance internacional y respaldado por la industria.
«Esto es el duro trabajo de muchos años. Se trata del reconocimiento de todo, no solo de este disco», dice el artista «tranquilo y muy feliz» por la importancia del galardón y lo que significa. «Sabía que había posibilidades, porque lo que me llegaba es que decían que era el trabajo mejor posicionado para ganar», señala. Los buenos presagios que llegaban de Colombia o Brasil al final se convirtieron en una realidad.
Daniel Minimalia se acuerda del día en que tomó el camino de la profesionalización en la música. «Le escribí un e-mail al jefe del concesionario de coches en el que trabajaba de contable, diciéndole que no volvía», rememora. Eso ocurrió en el 2011. Desde entonces, haciendo las veces de empresario, músico y promotor, se dedicó a difundir su música por todo el país. También en el extranjero. Contratando teatros, asumiendo riesgos, sumando pérdidas y, finalmente, saliendo a flote como una exitosa propuesta de alcance universal.
«Siento por parte de los músicos de Estados Unidos y Latinoamérica mucho respeto», apunta esperando que el premio le abra nuevas puertas. «A los programadores lógicamente le gusta que tengas un Grammy Latino, que da una proyección totalmente diferente al proyecto». En ese sentido, su música instrumental que mucho comparan con Mike Oldfield y que combina elementos folk con la llamada world-music pide una expansión sin fronteras.
Daniel Minimalia: «Me he colado en una fiesta a la que no estaba invitado»
El músico planea irse a vivir a Estados Unidos. «Es cuestión de tiempo que lo haga», confirma. De hecho iba a instalarse este mismo año, pero la crisis del coronavirus frustró sus planes. También ha afectado el virus al desarrollo normal de su trabajo. Él, sin embargo, se lo toma como un contratiempo más. «Me he llevado tantos palos en esto, he tenido tantas deudas y lo he pasado tan mal, que ante algo como esto, lo que hago es adaptarme y buscar la mejor salida posible». Esa han sido en el 2020 «entre 12 y 13 conciertos con éxito».
Dedicado a su madre
Daniel Minimalia quiso dedicar el premio a su madre, fallecida en marzo. «Fue algo súbito. Tenía un concierto el 8 de marzo en la sala Clamores y el día antes me llamó mi hermana para decirme que había fallecido», rememora. «Fui y volví a Madrid para hacer el concierto en su memoria».
Precisamente, fue otra muerte familiar la que le abrió la puerta. El fallecimiento de un abuelo del que no pudo despedirse desembocó en su primer tema instrumental, Adiós. El paso inicial de su gozosa carrera actual.